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No hay alternativa
Por Francisco Betes | enero 1, 2012
El galopante desprestigio de la clase política es un precio demasiado alto a pagar
Supone que los cimientos de nuestro sistema democrático se están resquebrajando
Y lo que es peor, no tenemos recambio
El sistema ha funcionado razonablemente bien y los españoles han hecho un gran trabajo eligiendo un candidato por mayoría absoluta
Algo deberemos de hacer para que la crisis económica, además de un país empobrecido, no nos deje un país sin proyecto, sin ilusión, y sin esperanza
Yo sinceramente no se qué es.
Pero tal vez un frente democrático de saneamiento de la clase política que excluya, los excesos, la corrupción y el amiguísimo, podría ayudar.
Y un frente de consenso democrático que explique al país la situación, negocie a cara de perro en Europa y nos explique a todos los sacrificios a realizar, podría también ayudar
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